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Permeabilidad intestinal: cómo detectarla y tratarla con la alimentación

permeabilidad intestinal
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    La permeabilidad intestinal es la capacidad selectiva que tiene el intestino de impedir que sustancias de gran tamaño pasen desde el intestino hasta la circulación sanguínea. Cuando el intestino deja pasar sustancias dañinas de forma permanente, pueden aparecer muchos problemas de salud, desde diarrea hasta enfermedades de la piel y neurológicas1.

    Te explicamos las causas de los trastornos de permeabilidad intestinal, cómo identificarlos a tiempo y cómo tratarlos con la alimentación.

     

    ¿Qué es la permeabilidad intestinal?

    La permeabilidad intestinal es una función normal del intestino que permite el paso de sustancias beneficiosas (agua, electrolitos, minerales, vitaminas, proteínas y grasas) mientras que bloquea las sustancias potencialmente dañinas (toxinas microbianas, fármacos y alimentos sin digerir)1,2.

    La función más importante de la permeabilidad intestinal es reconocer lo propio de lo ajeno, mediante el desarrollo de tolerancia en los primeros años de la vida a los alimentos y otras sustancias importantes a las que se expone el intestino2.

    La permeabilidad no se trata de una función exclusiva del intestino, sino que es una propiedad esencial de todas las superficies de intercambio del organismo. Por ejemplo, la barrera hematoencefálica impide el paso de sustancias dañinas, microorganismos y muchos de los medicamentos al cerebro3.

     

    Función de la barrera intestinal

    La barrera intestinal y la permeabilidad intestinal son dos cosas distintas. Mientras que la barrera intestinal es la pared que separa la luz intestinal de la pared interna del intestino, la permeabilidad intestinal es una característica funcional de la barrera intestinal.

    La barrera intestinal es como un sándwich formado por 3 capas4:

    1. Capa mucosa: es la parte más externa y está formada por moco, nutrientes como los ácidos grasos de cadena corta y la microbiota. Actúa como un muro que impide que las toxinas y los patógenos se enganchen a la pared intestinal.
    2. Capa de células epiteliales intestinales: son como ladrillos que recubren la superficie externa de la pared intestinal. Se encargan de regular el transporte del agua y los nutrientes a los tejidos.
    3. Capa con las células inmunitarias: es la parte más interna. Su función es atacar a los agentes patógenos mientras que no reacciona frente a la microbiota y los alimentos inocuos (estado de activación constante conocido como “inflamación fisiológica”).

     

    La barrera intestinal actúa como un guardián presente tanto en el intestino delgado como en el intestino grueso, que se encarga de4:

    • Controlar el flujo de nutrientes y de bacterias.
    • Mantener el equilibrio entre tolerancia (reposo) e inflamación (activación) ante las sustancias externas.
    • Garantizar una adecuada absorción de los nutrientes y un buen funcionamiento de las defensas a través de la microbiota intestinal.

     

    Existen diferentes pruebas para medir la permeabilidad e integridad intestinal. Una de las más utilizadas es el test de manitol/lactulosa. Consiste en tomar un líquido con una molécula de gran tamaño (azúcar). En caso de tener una barrera intestinal alterada, el azúcar atraviesa la barrera intestinal, aparece en la circulación sanguínea y puede detectarse en orina. Mientras que, si la pared intestinal está intacta, esta molécula no se observará en la orina5.

    Mientras que los tests de zonulina en heces o en sangre se suelen utilizar para conocer el estado de la permeabilidad intestinal, la realidad es que la zonulina es más fiable para medir la inflamación y no tanto la permeabilidad6.

     

    ¿Qué ocurre cuando se altera la barrera intestinal?

     La alteración de la permeabilidad intestinal es un desequilibrio de la función de la barrera intestinal que se traduce en una pérdida del equilibrio intestinal, deficiencias nutricionales y enfermedades7.

    Cuando la alteración de la permeabilidad intestinal es temporal, no suele dar problemas. Pero cuando la barrera intestinal no puede regular el paso de sustancias perjudiciales de forma permanente, aparecen las consecuencias que van más allá del intestino8.

    Aunque el síndrome del intestino permeable no es una enfermedad propia, la alteración de la permeabilidad intestinal es una condición necesaria para que se desarrollen otras patologías.

    De hecho, las alteraciones en la barrera y la microbiota intestinales son una de las causas implicadas en el desarrollo de diferentes enfermedades, que son entre otras8,9,10:

    • Digestivas: síndrome del intestino irritable, enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedad de hígado graso no alcohólico y celiaquía.
    • Neurológicas y psiquiátricas: enfermedad de Alzheimer, Parkinson, ansiedad y depresión.
    • Pediátricas: obesidad, diabetes, autismo y trastornos por déficit de atención e hiperactividad.
    • Dermatológicas: rosácea, acné y dermatitis atópica.
    • Endocrinas: problemas de tiroides y obesidad.

     

    Síntomas y señales de una barrera intestinal alterada

     La permeabilidad intestinal alterada no incluye un grupo de síntomas parecidos ni característicos que permiten identificar a las personas que la padecen. Los síntomas de un paciente con síndrome del intestino irritable, diabetes o cirrosis son muy diferentes, aunque en todos pueda detectarse un aumento de la permeabilidad intestinal11.

    Los síntomas que de forma habitual acompañan a la hiperpermeabilidad intestinal son aquellos relacionados con una alteración en la digestión y absorción de los nutrientes de los alimentos11:

    • Molestias digestivas
    • Fatiga y malestar general
    • Intolerancias y alergias alimentarias

     

    Factores que pueden afectar la permeabilidad intestinal

     Esto es lo que puede alterar la permeabilidad intestinal12,13,14:

    • Edad (a medida que envejecemos, la barrera intestinal se debilita)
    • Infecciones gastrointestinales por virus, bacterias, parásitos o hongos
    • Algunos medicamentos, como los antibióticos, el omeprazol y los antiinflamatorios como el ibuprofeno
    • Alimentos con edulcorantes y emulsionantes (helados, alimentos y bebidas light, platos precocinados)
    • Tabaco
    • Alcohol
    • Estrés

    Todas estas causas pueden debilitar la barrera intestinal, a través de atacar el moco del intestino. El resultado es que hay un contacto directo entre las sustancias que pueden ser perjudiciales y las células del intestino.

    Pero no todos los cambios en la permeabilidad son perjudiciales para la salud. Por ejemplo, las saunas, las maratones y el embarazo alteran la permeabilidad intestinal sin que esto se traduzca en la aparición de una patología15.

     

    Cómo mejorar la salud intestinal con la alimentación

     La alimentación tiene un efecto directo sobre la permeabilidad intestinal. En la mayoría de los casos, cuando hay una alteración de la permeabilidad intestinal, también hay un desequilibrio en la microbiota intestinal.

    Para mejorar la barrera intestinal con la alimentación es recomendable actuar de manera conjunta sobre la microbiota intestinal, la capa de moco y las células epiteliales intestinales.

     

    Alimentos que favorecen la barrera intestinal

     Para reforzar la barrera intestinal y recuperar el intestino incorpora en tus menús diarios los alimentos ricos en12:

    • Betacarotenos (zanahoria, calabaza, calabacín y mango, entre otros)
    • Vitamina D (huevos, lácteos enteros y pescado azul)
    • Zinc (marisco, pescado y carne)
    • Flavonoides (frutas, verduras, te y soja)
    • Jengibre: tiene efectos carminativos, reduce los calambres intestinales y previene la flatulencia e hinchazón. Está contraindicado en casos de gastritis graves, si hay sangrado en heces o en fases activas de enfermedad inflamatoria intestinal.
    • Glutamina: es un aminoácido fundamental para mejorar la permeabilidad intestinal y para reforzar las defensas. Lo puedes cubrir a través de los frutos secos, los lácteos y la carne y en forma de complemento alimenticio, sola o junto con proteína de suero de leche (normalmente se usan 5 gramos, 2 veces al día, fuera de las comidas)16,17.
    • Cúrcuma: es una especie que se puede utilizar de forma versátil en muchos platos. Los beneficios a nivel de la barrera intestinal se han encontrado cuando se utiliza en forma de extractos concentrados de cúrcuma18.

     

    Importancia de la fibra y los prebióticos

     La fibra con efecto prebiótico también es clave para ayudarte a recuperar el buen estado del intestino. Los alimentos ricos en fibra trabajan en equipo junto con las bacterias del intestino para mejorar la permeabilidad intestinal.

    Si tienes dolor abdominal, hinchazón y gases, es recomendable que priorices los alimentos con fibra soluble (fruta, verdura, membrillo) frente a los que tienen fibra insoluble (cereales integrales, fruta con piel y frutos secos).

    Aquí el consejo práctico es que ajustes tu ingesta de fibra en función de tu sintomatología y, en el caso de que no estés tomando nada de fibra, la puedes aumentar de forma gradual (5 gramos diarios).

    En una primera etapa es una buena idea prescindir de las fibras fermentables (inulina, fructanos, fructooligosacáridos y galactooligosacáridos) que encuentras en las legumbres y en algunos complementos alimenticios19.

    Tanto el psyllium como la goma guar parcialmente hidrolizada potencian el crecimiento de las bacterias beneficiosas del intestino, mejoran la barrera intestinal y tienen un efecto calmante digestivo sin empeorar la hinchazón19.

     

    Rol de los probióticos en la salud intestinal

     Los probióticos pueden ayudarte a mejorar la permeabilidad intestinal equilibrando la microbiota que tapiza la capa de moco del intestino, fortaleciendo las uniones entre las células epiteliales del intestino y contrarrestando el estrés oxidativo y la inflamación de bajo grado en el intestino20.

    La combinación de las cepas de Lactiplantibacillus plantarum CECT 7484, L. plantarum CECT 7485 y Pediococcus acidilactici CECT 7483 es una de las más estudiadas para mejorar la permeabilidad y la inflamación intestinal, que se encuentran alteradas en las personas con intestino irritable21,22.

    Los probióticos también pueden aliviar las úlceras provocadas por la Aspirina, lo que apoya su empleo para mejorar la permeabilidad intestinal en personas sanas23.

    Además de escoger el probiótico adecuado, recuerda que la dosis y la duración del tratamiento probiótico influyen en su eficacia, siendo necesarios tratamientos de larga duración para conseguir beneficios sobre la permeabilidad intestinal.

     

    Conclusión

     La barrera intestinal es la primera línea de defensa de tu cuerpo que bloquea el acceso de los patógenos y otras sustancias nocivas a la circulación sanguínea, mientras que favorece el paso de agua, algunos iones, proteínas y grasas.

    Si quieres mejorar la permeabilidad intestinal, incluye en tu alimentación alimentos ricos en betacarotenos, vitamina D, zinc y flavonoides, jengibre, cúrcuma, glutamina, fibras prebióticas y probióticos.

    Los probióticos que más se han estudiado para mejorar la permeabilidad intestinal son las mezclas de cepas L. plantarum y P. acidilactici. Junto con los alimentos ricos en fibra producen cambios positivos en la permeabilidad intestinal.

     

    Referencias:

     

    1. Gómez Senent S. Permeabilidad intestinal. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2022.
    2. Bischoff SC, Barbara G, Buurman W, et al. Intestinal permeability – a new target for disease prevention and therapy. BMC Gastroenterology. 2014; 14:189. doi: 10.1186/s12876-014-0189-7.
    3. Carloni S, Rescigno M. The gut-brain vascular axis in neuroinflammation. Semin Immunol. 2023; 69:101802. doi: 10.1016/j.smim.2023.101802.
    4. Sociedad Europea de Neurogastroenterología y Motilidad. Descubra el papel esencial de la barrera intestinal en la salud . Disponible en: https://www.gutmicrobiotaforhealth.com/es/descubra-el-papel-esencial-de-la-barrera-intestinal-en-la-salud/ (acceso el 9 de septiembre de 2025).
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    6. Vanuytsel T, Tack J, Farre R. The role of intestinal permeability in gastrointestinal disorders and current methods of evaluation. Front Nutr. 2021; 8:717925. doi: 10.3389/fnut.2021.717925.
    7. Santos J, Rescigno M. Gut barrier leakiness: time to take it seriously? Gastroenterology. 2024; 167(6):1080-1082. doi: 10.1053/j.gastro.2024.08.011.
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    9. Ioannou M, Borkent J, Severance EG, et al. Biomarkers of intestinal permeability in major psychiatric disorders: Distinct biological roles call for a more nuanced application. Prog Neuropsychopharmacol Biol Psychiatry. 2025; 139:111405. doi: 10.1016/j.pnpbp.2025.111405.
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